Los viejos de antes, porque los de ahora somos nosotros, nos decían:” Los trapos sucios se lavan en casa”. Porque nadie quería el juicio público sobre sus asuntos privados. Y con la misma discreción, gracias a la pandemia, los frentistas venimos haciendo las evaluaciones en casa, en pequeñas conversaciones, pero las reflexiones son semejantes, las conclusiones también van creando nueva conciencia de lo que sucedió para ayudar a resistir el presente político en medio del humo del “carmelavirus”. Somos un pequeño estado, casi una ciudad estado, por su alta concentración urbana, plantados demográficamente en menos de 3.5millones. Condenados a ser menos y mas viejos en el 2050. Disminuyendo rápidamente por la tasa negativa de nacimientos respecto a defunciones. Las generación del 50, aquellos que llegaron a la adustez, veinte o treinta años en esa década, quedan dos J.Mujica y Sanguinetti. ¡En este país geriátrico nos parece joven un cincuentón largo presidente! Los de la décad
Artículos periodisticos publicados en diario La República de Montevideo y otros medios.