Leyendo y releyendo la gran obra de Cervantes, “El ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha”, uno no deja de asombrarse de que la naturaleza humana es la misma, en cualquier siglo, en el “510 o en el actual”,como decía el gran Dicèpolo. Entre la peripecia de vida del glorioso caballero y su escudero se pinta de cuerpo entero a la naturaleza humana de todos los tiempos y clases sociales. Hoy, como antaño, seguirnos considerando “locos”a los que persiguen un ideal de vida o una sociedad diferente. Al punto de que el planteo de una sociedad perfecta fue catalogado como “Utopía”, que quiere decir , más o menos, “en ningún lugar”, a la ciudad descripta por Tomàs Moro, cura que se inspiró en las versiones idealizadas de la vida comunitaria de algunos pueblos americanos llevado por las versiones de los viajeros europeos. De este espejismo surgen todos los sueños de sociedades “perfectas” que desde el mundo europeo se imaginaron como alternativa a su contraecha naturaleza, eso que ello
Artículos periodisticos publicados en diario La República de Montevideo y otros medios.